El 20 de febrero de 1844 nació de Ludwig Boltzmann (1844-1906).
Fuente: Wikipedia
Boltzmann es, sin duda, uno de los gigantes de la ciencia. Este físico austriaco desarrollaría la mecánica estadística, área científica que relaciona las propiedades de la materia a niveles microscópico y macroscópico. Una consecuencia de la mecánica estadística es la existencia de átomos, siendo Boltzmann uno de los principales defensores del atomismo a finales del siglo XIX (Sí, aunque no lo parezca y pese a que la Teoría Atómica de Dalton se presentó a comienzos del Siglo XIX, a finales del siglo XIX y principios del XX, aún muchos científicos dudaban de la existencia real de los átomos). Boltzmann también realizó importantes aportaciones a la teoría cinética de los gases y al desarrollo de los principios de la termodinámica, dando una visión estadística a la segunda ley; de hecho, la “visión” que tenemos de la entropía como una medida del desorden de un sistema, se la debemos a Boltzmann.
Distribución de Boltzmann (la relación entre número de partículas en un estado y su energía)
También descubrió la ley de Stefan-Boltzmann, que relaciona la densidad de la radiación de un cuerpo negro con la temperatura.
Fue un convencido atomista, que a veces sufrió el escarnio de la otra corriente filosófica-científica de la época, los energetistas, que no creían en la existencia de átomos, simplemente los consideraban un modelo mental sin existencia real.
Boltzmann se suicidó e 6 de septiembre de 1906 en un periodo de depresión. Se dice que como consecuencia de la frustración de que sus teorías científicas no fuesen adecuadamente aceptadas. Posiblemente, si hubiese vivido más tiempo, hubiese sido galardonado con el, muy merecido, Premio Nobel de Física.
La tumba de Boltzmann en Viena, en la que está grabada la ecuación que relaciona la entropía y el número de estados de un sistema (Fuente: Wikipedia)
Bernardo Herradón (@QuimicaSociedad)